UN LEGADO QUE TRASCIENDE GENERACIONES. 

La historia de la familia McNab con el pueblo Isleño.


Ron McNab es ampliamente reconocido en Roatán por su vocación de servicio, un valor que asegura haber heredado de su abuelo, Carl McNab, recordado en toda la isla por tender la mano sin esperar nada a cambio. Desde niño, Ron creció rodeado de ese ejemplo de solidaridad, formando la base de lo que luego sería su vida comunitaria.


Mucho antes de ocupar un cargo público, Ron y su familia ya estaban presentes en los momentos más difíciles para la comunidad: emergencias médicas, traslados urgentes, apoyo a niños y personas vulnerables, y acompañamiento a familias que no tenían a quién acudir. Para ellos, servir nunca fue una obligación, sino una forma natural de vivir.


La familia McNab es conocida en Roatán por su constante apoyo en situaciones críticas: desde evacuaciones médicas a tierra firme, compra de medicamentos, asistencia social, hasta el difícil proceso de traslado marítimo de personas fallecidas. Su ayuda ha sido clave para muchas familias en momentos de dolor e incertidumbre.


En el ámbito educativo, durante años han entregado becas, útiles escolares, materiales de construcción y equipos para mejorar escuelas, contribuyendo al desarrollo de niños y jóvenes del municipio.


Roatán es una comunidad pequeña, y con el tiempo se han acumulado muchas historias donde la familia McNab ha extendido su mano. Historias que rara vez se cuentan, porque su apoyo nunca buscó cámaras ni reconocimientos, solo brindar alivio donde hacía falta.


Ron atribuye este camino de servicio a las enseñanzas de su abuelo, y a sus padres John McNab y Susan McNab Thompson, quienes marcaron su vida con el ejemplo. Él expresa su deseo de que este legado continúe en sus hijos, manteniendo viva una tradición de ayuda genuina y cercana.


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